ASIRIA, SIóN Y EGIPTO (el núcleo central de Paz y Justicia
del mundo venidero/atid lavoh)

El juicio definitivo sobre “el asirio” - epitome de los enemigos de ISRAEL que convulsionan el mundo - vendrá del Mesías de ISRAEL:

“Y éste (el Mesías/Rey) será nuestra paz.
Él nos librará del asirio
cuando venga contra nuestra tierra
y pise nuestras fronteras."


Con respecto al actual tumulto y violencia en esa región - que será central en el mundo venidero/atid lavoh - se dice en Isaías 27:12:


"Y sucederá en aquel día
que el SEÑOR trillará
desde la corriente del
Eufrates hasta el torrente
de Egipto..."


Las tropas que hoy la recorren son un tipo de esa trilla prometida. Pero la liberación - la paz - vendrá solo con el advenimiento del Mesías/Meshiaj, no antes. Uno tras otro los "planes de paz" ideados por el hombre fracasan y fracasarán. La violencia allí nos duele, pero es lo que esta anunciado. La trilla del Señor abarcará la amplia región aludida en el Salmo 89:25 como el territorio que heredará de parte del Padre el Hijo de David:


"Asimismo pondré su mano sobre el mar
y sobre los ríos su diestra".


en donde “el mar” es el mar Mediterráneo y “los ríos” son el Eufrates y el Tigris.


Todo allí será transformado, restaurado, inundado de Gloria e impregnado de una hermosura tal que no podemos imaginar con nuestra mente carnal. Solo podemos percibirla por la fe, mas allá de los parámetros distorsionados de hoy. Para vislumbrar algo - como sombras con respecto a lo que será una realidad radiante - digamos que sabemos que no habrá allí desiertos y si vergeles deslumbrantes de verdor como sugiere Isaias 35:6:

"porque aguas brotarán en el desierto
y arroyos en el Arabá".


y confirma Isaías 41:18-20:


“Haré brotar ríos en los cerros desiertos
y manantiales en medio de los valles;
convertiré el desierto en ciénagas,
haré brotar arroyos en la tierra seca.

En el desierto plantaré cedros,
acacias, arrayanes y olivos;
en la tierra seca haré crecer
pinos juntamente con abetos y cipreses,

para que todo el mundo vea y sepa,
y ponga atención y entienda que yo,
el Señor, he hecho esto con mi poder,
que yo, el Dios Santo de Israel,
lo he creado."


¡Contundente afirmación!.

Y si queremos tener la visión de los sembrados fertilizados por un régimen de lluvias restaurado (nota 1) lo relata el salmo 65:9-11:

“Visitas la tierra y la riegas;
en gran manera la enriqueces.
Con el río de Dios, lleno de aguas,
preparas el grano de ellos
cuando así la dispones.

Haces que se empapen sus surcos,
haces correr el agua por sus canales,
la ablandas con lluvias,
bendices sus renuevos.

Tú coronas el año con tus bienes
y tus nubes destilan abundancia,
(Salmo 65:9-11)


Y se lee en Isaias 51:3:


"Ciertamente consolará YaHVéH a Sión;
consolará todas sus ruinas.
Cambiará su desierto en un edén
y su tierra estéril en huerto de YaHVéH
se hallará en ella alegría y gozo,
alabanzas y cánticos".

“Tierra, no temas; alégrate y gózate,
porque YaHVéH hará grandes cosas”.
(Joel 2:21)

***

La nueva Jerusalem - hoy de geografía escarpada y sedienta - será surcada por un río de agua de vida que surgirá del nuevo Templo. ¿Podemos imaginar su gloria y la cualidad sobrenatural de sus aguas?:


"Entonces me dijo:
- Estas aguas salen a la región del oriente,
descienden al Arabá y entran en el mar.
Y al entrar en el mar, las aguas son saneadas.
Todo ser viviente que nade por dondequiera
que entren estos dos ríos, vivirá;
y habrá muchísimos peces
por haber entrado allá estas aguas,
pues serán saneadas. Vivirá todo
lo que entre en este río".
(Ezequiel 47:8-9)


de modo que las aguas de estos ríos - que descenderán desde el Templo hacia el oriente y occidente - sanearan todo lo que toquen, tanto las aguas sulfurosas de lo que hoy llamamos Mar Muerto, como la de los océanos en donde sus aguas desemboquen, que serán limpios de toda contaminación y llenos de bullente vida. El nuevo Templo irradiará vida ¿Se enciende nuestra fe al imaginarlo?. ¿Hay vida similar en los templos que cubren hoy la "tierra santa"?


Leamos más:

“Convertiré todos mis montes en camino,
y mis calzadas serán levantadas”.
(Isaias 49:11)


Y también:


"Cuando, haciendo cosas terribles
cuales nunca hubiéramos esperado,
descendiste, se derritieron
los montes delante de ti".
( Isaías 64:3)


Y también:


"¡Todo valle sea alzado
y bájese todo monte y collado!
¡Que lo torcido se enderece
y lo áspero se allane!
Entonces se manifestará la gloria de YaHVéH
y toda carne juntamente la verá".
(Isaías 40:4-5)


Estos textos - que también tienen una lectura espiritual - nos hablan de una gran conmoción en la topografía de la venidera Sión. El paisaje abrupto de hoy dejará paso a horizontes amplios y apacibles bajo la luz dorada de un nuevo sol (nota 2). Las áreas desiertas serán surcadas por ríos de aguas transparentes. Y por doquier habrá sembrados y vida tocada por Su gloria:


"No harán mal ni dañarán
en todo mi santo monte..."
(Isaias 11:9)


la llamada "ley de la selva" ya no estará vigente. Y existirá un trayecto sin impedimentos donde hoy se acumulan barreras, muros, cercos de púas y muerte. Todo resplandecerá de Su gloria. ¿Puede el actual territorio de "Eretz Israel" ser una herencia bendecida o es necesario esperar por otra?

***

Veamos más: cuando el Reino del Hijo de David sea establecido - ya derrotados los enemigos cercanos y lejanos - lindará con Asiria al norte y Egipto al sur y habrá paz entre los tres como está dicho:

"En aquel tiempo habrá una calzada
de Egipto hasta Asiria,
y entrarán asirios en Egipto
y egipcios en Asiria;
y los egipcios y los asirios
servirán juntos a YaHVéH
En aquel tiempo,
Israel será tercero con Egipto
y con Asiria, para bendición
en medio de la tierra”.
(Isaías 19:22-24)

Es decir: el núcleo de paz - de bendición - del mundo venidero/atid lavoh tendrá a Asiria al norte (¡actual Irak!), Sión - la herencia de los redimidos - en el centro y Egipto al sur. Y los tres adorarán al Dios/Elohim de ISRAEL.


En toda esa extensión se sentirá la Presencia de "YaHVéH Justicia Nuestra", reinando desde el Trono del Templo.


Y las naciones miraran hacia esa centro refulgente con admiración y adoración. Allí, en una Jerusalem irradiante de Paz, Justicia y Sabiduría, estará la morada del Gran Rey y Sumo Sacerdote ministrando a las naciones. Y ”la tierra será llena del conocimiento de YaHVéH, como las aguas cubren el mar” (Isaías 11:9). Y habrá sido quitado el velo que hoy cubre las naciones:


"Y destruirá en este monte - Sión -
la cubierta tendida sobre todos los pueblos,
el velo que envuelve a todas las naciones".
(Isaias 25:7)


Hoy el entendimiento de las naciones está cubierto por un velo de oscuridad, y la historia que desfila ante nuestros ojos es consecuencia de ese entendimiento entenebrecido que inunda las relaciones internacionales. Veamos que el firme reinado mundial de "YaHVéH Justicia Nuestra" extinguirá definitivamente la guerra -:


“Él juzgará entre las naciones
y reprenderá a muchos pueblos.
Convertirán sus espadas en rejas de arado
y sus lanzas en hoces;
no alzará espada nación contra nación
ni se adiestrarán más para la guerra”.
(Isaías 2:4)

Y habrá alegría y gozo por esta reinado mundial desde el Trono de Jerusalem, tan diferente a la de las frustrantes instituciones "guardianas" de la paz mundial quehoy tenemos:

"Alégrense y gócense las naciones,
porque juzgarás los pueblos con equidad
y pastorearás las naciones en la tierra".
(Salmo 67:4)

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Dice Isaías 65:9-19

"Sacaré descendencia de Jacob,
y de Judá, el heredero de mis montes;
mis escogidos poseerán por heredad la tierra,
y mis siervos habitarán allí.

Será el Sarón redil de ovejas
y el valle de Acor majada de vacas,
para mi pueblo que me buscó".

La Palabra llama "Jacob" a la descendencia del norteño reino de Israel. Efraín fue declarado primogénito legal de Jacob ¡a pesar de ser su nieto! (Génesis 48:5; Jeremías 31:9) en sustitución del conscupicente Rubén. De modo que "Jacob" se refiere al colectivo "Efraín": las diez tribus desterradas en las naciones (nota 3).

Y este Israel con la apariencia de los gentiles con los cuales se mezcló durante siglos es también el que recuperó sus raíces abrahamicas a consecuencia de haber escuchado la Palabra del evangelio y haberla creído en su corazón (ver: "La herencia planetaria de Abraham"). Son los escogidos y fieles, cristianos congregados en las iglesias de Cristo durante los siglos de la gracia. Fieles a ña Palabra, edificados en la fe y libres de la cizaña que sembró el enemigo. Son los que no cayeron en la apostasía final ni recibieron la "marca de la bestia".

También se dice en el pasaje citado: "(sacaré) de Juda el heredero de mis montes" refiriéndose a nuestro Señor Jesucristo (Ap. 22:16) al que luego de su venida llamaremos "YaHVéH Justicia Nuestra" (Jer. 23:6).

Y en el remanente salvo estarán también incluidos los escogidos de Judá, que se unirán al remanente de Efraín(Israel) en el día inaugural del Reino, y serán de nuevo un solo pueblo:


"Se congregarán los hijos de Judá y de Israel - Efrain -,
nombrarán un solo jefe
y se levantarán de la tierra,
porque grande será el día de Jezreel".
(Oseas 1:11)


a esto llama la profecía el Tabernáculo de David restaurado levantado de sus ruinas: doce tribus bajo un solo Jefe - como en los días de David y Salomón - que recibirían un vergel recién creado - como Jardín del Eden - por herencia (¿en que tribu estaremos cada uno de los escogidos?, lo sabremos ese día).

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Finalmente la Palabra compara el hermoso paisaje de la Sión venidera, llena de gloria, restaurada a una belleza incomparable, ampliada y poblada - densamente - por los redimidos venidos "de los cuatro vientos, desde el extremo de la tierra hasta el extremo del cielo" (Marcos 13:27) a un "vestido de honra", o a una "novia adornada" resplandeciente en su pureza:

“Alza tus ojos alrededor, y mira:
todos estos se han reunido,
han venido a ti.
»Vivo yo, dice Jehová,
que de todos, como de vestidura
de honra, serás vestida;
y de ellos serás adornada como una novia.


Porque tu tierra devastada,
arruinada y desierta,
ahora será estrecha por la multitud
de los moradores, y tus destructores
serán apartados lejos.
(Isaias 49: 18-19)

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Apropiémonos por la fe de todas estas cosas en los días de hastío y contradicciones, de ofensa a la moral bíblica y a quienes la defienden en que vivimos. Son días pasajeros, no hay en ellos ningún germen de permanencia, no hay arreglo en ellos. Cuando veamos crisis, muerte y destrucción en el Oriente Medio ¡cambiemos la visión!. Las cosas que vemos son la antítesis de lo que será. Allí estará el núcleo de Paz y Justicia del mundo venidero. Hacia allí se volverán las naciones con reverencia porque desde Jerusalem y de su Templo emanará la Autoridad. Dice Isaías 43:19, pronto a cumplirse:

”He aquí que yo hago cosa nueva;

pronto saldrá a luz, ¿no la conoceréis?
Otra vez abriré camino en el desierto
y ríos en la tierra estéril”

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Nota1): los parámetros constantes del clima en Sión glorificada serán restaurados. Especialmente su régimen de lluvias directamente ligado a la siembra y la cosecha, que esta vez no fallarán porque no habrá rebeldía en el pueblo santo (ver ”La causa del desorden climático”):

“Vosotros también, hijos de Sión,
alegraos y gozaos en YaHVéH, vuestro Dios;
porque os ha dado la primera lluvia a su tiempo,
y hará descender sobre vosotros
lluvia temprana y tardía,
como al principio.
Las eras se llenarán de trigo
y los lagares rebosarán de vino y aceite”.
(Joel 2:23-24)

Nota 2) una demostración de lo diferente de los parámetros de percepción en el reino mesiánico es que habrá un nuevo sol y una nueva luna:

“Y será la luz de la luna como la luz del sol,
y la luz del sol será siete veces mayor,
como la luz de siete días,
el día que YaHVéH ponga una venda
en la fractura de su pueblo
y cure la llaga que El ha causado”.
(Isaaias 30:28)

Naturalmente que si hoy se nos dice que tendremos un sol siete veces mayor no parece una buena noticia. Como tampoco entusiasma que la palidez de la luna sea sustituida por una faz brillante como el sol de hoy. Pero esto con seguridad será hermoso en esos días, cuando sea curada la herida que YaHVéH causo a su pueblo a causa de su rebeldía y podamos percibir las cosas sin la obstrucción del pecado. Y cuando tengamos un cuerpo de naturaleza celestial.

También se dice:

“Y creará YaHVéH sobre toda la morada
del monte Sión y sobre los lugares
de sus asambleas, nube y oscuridad de día,
y de noche resplandor de llamas de fuego.
Y sobre todo, la gloria YaHVéH
como un dosel”;
(Isaias 4:5)

lo que parece ser una constante que debemos tener en cuenta toda vez que la Gloria de YaHVéH se hace manifiesta a su pueblo. Así durante el cruce del Mar Rojo se dice:

“Nunca se apartó del pueblo la columna de nube
durante el día, ni la columna de fuego
durante la noche”.
(Exodo 13:21-22)


y también durante la peregrinación en el desierto:


“porque la nube de YaHVéH estaba de día
sobre el Tabernáculo, y el fuego estaba
de noche sobre él, a la vista de toda
la casa de Israel. Así ocurría
en todas sus jornadas".
(Exodo 40:38)

En donde vemos el mismo efecto: cuando la Gloria de YaHVéH esta presente con su pueblo una nube lo cubre durante el día y una nube de fuego durante la noche. No podemos imaginar tal escena pero sin duda todos esos efectos abundarán para nuestra felicidad y gozo en el mundo venidero/atid lavoh.

nota 3): las diez tribus en el destierro son también llamadas "tribus de Jacob" en Isaías 49:6:

"él (YaHVéH) dice:
«Poco es para mí que solo seas mi siervo
para levantar las tribus de Jacob
y restaurar el resto de Israel..."

en donde YaHVéH se esta refiriendo a la primera tarea del Siervo de YaHVéH - Jesús/Yeshua - que sería la de congregar el resto/remanente de Israel de entre las naciones. Y a esto debería agregarse ser "luz a las naciones" para que la oportunidad de salvación llegue "a toda criatura", a todos.

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