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CRISTIANO-MESIÁNICOS
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"Se congregarán los hijos de Judá y de Israel,
nombrarán un solo jefe...
porque grande será el día de Jezreel".
Oseas 1:11
Si observamos los confusos sucesos de hoy a la luz de la profecía - discerniremos que hay mucha agitación en el cielo. Y es que allí se están poniendo a punto los preparativos finales para la restauración del "Tabernáculo caído de David", o sea la inauguración del Reino de los Cielos en la tierra de la promesa. Esto supone volver a reunir en un solo pueblo (ammi) a la “casa de Israel” y a la “casa de Judá” como en los días de David, superando así la división en dos casas/familias/reinos del único Reino de ISRAEL en el año 930 A.C..
Y esta agitada preparación en los cielos impacta sobre los acontecimientos en el plano de la historia. Es que se está poniendo en marcha la transformación mas radical a escala planetaria que haya visto la historia de la humanidad. Los que vienen serán “cielos nuevos y una tierra nueva en los cuales mora la justicia” (2 Pedro 3:13).
Dice en Isaías 2:17:
"La altivez del hombre será abatida,
y la soberbia de los hombres será humillada;
y solo YaHVéH será exaltado en aquel día."
El momento mas oscuro de la noche se produce justo antes del amanecer, y nos estamos internando en ese momento de densas tinieblas que después del cual despuntará el amanecer mas glorioso de la historia: el día en que Dios/Elohim – YaHVéH - morará en la tierra y regirá el mundo con la vara de hierro de Su Justicia. Y lo llamaremos “YaHVéH justicia nuestra” (Jeremías 23:6)
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Recordemos brevemente como se llegó a la división del único reino de ISRAEL en dos reinos/casas:
En el año 1.010 A.C. el rey David consiguió unificar efectivamente el reino de ISRAEL luego del traumático reinado de Saúl e hizo de la “fortaleza de los jebuseos” – Jerusalem - la capital de un reino unificado bajo la “casa de David” que fue galardonado por victorias y gran renombre. A su muerte el reino unificado pasa a Salomón, al hijo de David con Betsabé.
Pidiendo sabiduría al cielo, y libre de guerras, el joven rey lleva al reino de su padre a un mayor esplendor. Pero luego de su muerte el reino davítico se divide en dos casas reinantes:: el Reino de Judá al sur, que sigue perteneciendo a la “casa de David” y el Reino de Israel al norte que mas tarde toma también el nombre de su ciudad capital fundada por el rey Omri: reino de Samaria. Y es útil recordar que cuando Roboam - el hijo heredero de Salomón - intenta marchar sobre el reino separatista del norte para someterlo es detenido por YaHVéH:
"No vayáis, ni peleéis contra vuestros
hermanos los hijos de Israel;
volveos cada uno a su casa,
porque esto lo he hecho yo.
Y ellos oyeron la palabra de Dios,
y volvieron y se fueron,
conforme a la palabra de YaHVéH."
(1Reyes 12:24; 2 Crónicas 11:2-4)
¡Anotemos esto!: la división en "dos casas" reinantes del reino davídico arquetípico – “Tabernáculo de David” (Amos 1:11) - fue decidida por YaHVéH en los cielos para el cumplimiento de Su Propósito. Y así el norteño reino de Israel siguió su curso en la historia bajo el linaje de Efraín y no bajo un rey de la "casa de David", siendo su primer rey el efrateo Jeroboam (1 Reyes 11:26).
Ahora bien, la profecía promete la restauración del reino davítico en los últimos días bajo un rey del linaje de David: el “Hijo de David”/ "Hijo del Hombre/ “León de Judá” (Apo 5:3: 22:16). Dice Amos 9:11:
“En aquel día yo levantaré
el tabernáculo caído de David:
cerraré sus portillos, levantaré sus ruinas
y lo edificaré como en el tiempo pasado”
Y lo que está agitando los cielos estos días son los preparativos para el cumplimiento - luego de casi 3.000 años - de esta profecía central del plan profético: la restauración del "Tabernáculo caído de David", a la que también se refirieron los apóstoles en el primer concilio de la iglesia (Hechos 15: 16-17).
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“He aquí que el mal irá de nación en nación”
(Jeremías 25:32-33)
Y esta introducción en las tinieblas finales que vienen antes de la restauración del Tabernáculo de David tuvo una fecha de inicio: el 11:S. Ese día el frágil orden que existía en el mundo hasta el 2001 hizo implosión. Y entonces el Oriente Medio, desde Pakistán hasta el Sinaí, entró en ebullición con una virulencia que no conocíamos.
YaHVéH hizo un pacto solemne con Abram/Abraham:
“En aquel día el SEÑOR
hizo un pacto con Abram, diciendo:
tu descendencia he dado esta tierra,
desde el río de Egipto
hasta el río grande, el río Eufrates”
(Génesis 15.18)
¿No tendrá algo que ver el cumplimiento de ese pacto con las cosas que están sucediendo ahora en Oriente medio y Oriente próximo? “Aquel día” comienza en estos días que estamos viniendo en que YaHVéH esta prepasando el terreno – removiéndolo - para cumplir todas las cosas que ha prometido a su pueblo. Las cosas que están pasando ahora en esa región es paralelo a la toma de Palestina por el ISRAEL recién salido del desierto, liderado Josué. ¿Pensamos alguna vez que por mandato de YaHVéH fueron despojados de su tierra los antiguos habitantes de “Palestina” en aquellos días? Esto es algo duro de aceptar según los parámetros de estos días. Sin embargo el juicio de YaHVéH en la historia de los hombres, incluye profundas causas espirituales que apenas podemos discernir y que cruzan milenios relacionando hechos que a los ojos de los hombres están muy separados en la historia. YaHVéH es el mismo hoy, que en el de día la toma de Palestina por el ISRAEL nacido como nación en el Sinaí.
Si observamos bien as guerras y tensiones en Oriente Medio y Oriente Próximo nos hacen aprender, sin proponérnoslo, geografías que ignorábamos. Ante nuestros ojos desfilan desiertos, valles, las inconquistables montañas y cuevas de Afganistán, las planicies polvorientas y los desiertos de Irak, o los relieves sinuosos – en donde el enemigo puede estar a la vuelta de la próxima colina - del valle de Bekaa, en el Líbano. Una cosa es lo que piensan los hombres sobre las razones que mueven la historia, y otra los hilos conque Dios/Elohim – YaHVéH - teje el tapiz de nuestros días que nosotros solo vemos por detrás. Por eso para Él todo es claridad y Propósito, en tanto que para los hombres todo es confusión y despropósito. Y así, por razonables que parezcan los intentos por crear un nuevo orden en esas regiones que incluya parámetros de vida "democráticos", este intento continuamente se frustrará aún en el momento mismo en que parezca que está por alcanzarse. Es que siempre aparecerá un bochorno que desmoralizará todo, confundirá los ánimos y desandará caminos. Y es que la próxima etapa para las naciones no es una democracia de escala mundial, sino un Reino mundial no de hombre, sino encabezado por Dios mismo – “YaHVéH justicia nuestra” - morando con su pueblo en una nueva tierra y gobernando las naciones . Este es el cambio de sistema mas radical de la historia.
Sin embargo, a pesar de las continuas frustraciones en el intento de “democratizar” Oriente Medio por parte de los EEUU y sus aliados - surgidos de naciones que tienen una relación clara con pueblos de la descendencia de los “hijos de Israel”/”casa de Israel”/Efraín – estos intentos removedores preparan el camino de la profecía. La demolición precede a la restauración.
Y así, luego del 11-S una sucesión aparentemente alucinada de eventos mundiales cambiaron la escala de nuestras percepciones y pusieron en escena cuadros proféticos de los últimos tiempos. Primero los EE.UU descendencia de José/Efraín se encontraron con la descendencia de Benjamin - la etnia pasthun - que es la etnia principal en Afganistán. Pero esta misión bélica en el tapiz que teje el Autor de la historia con nuestros desaciertos significa el inicio del reencuentro de los hermanos dispersos para hacer efectiva la restauración de ISRAEL. Kamil Karshai quizás tenga la apariencia del rey Saúl, cuyo nieto Afga emigro hacia esas tierras y su descendencia tomo luego posesión del país que lleva su nombre: Afganistán: país de Afga.
Y luego de este “encuentro” vimos un cuadro profético de raíces opuestas: el comienzo de la retribución al “cautiverio de Jacob” incluido en el juicio final sobre Babilonia – no misterio Babilonia, la gran ramera, sino la ciudad que cautivo a Israel - Este es un juicio de relevancia tal que solo será ejecutado definitivamente, no por las tropas de intervención humanas sino por el mismo Mesías de ISRAEL en su venida en poder y gloria.
En efecto, la llamada “Guerra de Irak” es solo un preanuncio de este juicio final sobre Babilonia, un cumplimiento parcial - aunque terrible - que marca el terreno de los hechos futuros. Leamos en Isaías 31:8:
“Entonces caerá Asiria
(actual Irak que ocupa los territorios de Asiria y Babilonia)
por espada no de varón,
y la consumirá espada no de hombre;
y huirá de la presencia de la espada...”
De modo que el juicio de retribución en curso Irak solo terminará “por espada no de varón”, esto es: serán inútiles hoy cualquier intento de solucionar la ecuación insoluble de Irak, por mas empeño y buena intención que se ponga.
Hoy hay tropas de países de la descendencia de los hijos de Israel/casa de Israel/Efraín - también llamada "casa de José" comprometidas en misiones militares en Oriente Medio y Oriente Próximo y así gente de la desterrada descendencia de los hijos de Israel/Efraín, dispersa y mezclada entre las naciones desde hace 2.700 años, es convocada en el plano inverso de la historia humana de nuevo a las geografías en donde vivieron sus antepasados en una especie de cumplimiento "oruga" de la profecía que oculta la mariposa - que será su cumplimiento cabal – cuando sus alas de gloria den el inicio al Reino de Dios/Tabernáculo de David en el “día de Jezreel”.
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RESUMIENDO: la profecía dice, y aun grita, que un remanente salvo de Israel volverá a su tierra y en el “día de Jezreel” se fundirá con un remanente salvo de Judá y volverán a ser un solo pueblo. Este pueblo estará bajo el gobierno de un solo Jefe: el “Hijo de David”/ ”Hijo del Hombre”/ ”YaHVéH justicia nuestra” y en esos días habra un mundo de Justicia y Paz – “nuevos cielos y una nueva tierra en los cuales mora la Justicia” - . Por lo tanto, estos dolorosos eventos que estamos viendo ahora en Oriente Medio y Oriente Próximo son la contrafaz de un hermoso tapiz que esta siendo tejido en los cielos por el Guía de la historia (Isaías 41:4). ¡Creámoslo los que confesamos su Nombre!. "Yo anuncio el fin desde el principio" dice YaHVéH: las guerras de hoy tienen sus causas en el lejano pasado (que es cercano para Dios/Elohim) y apuntan al cumplimiento final de la profecía: el reino mesiánico/ atid lavho.
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(escrito en el 2005)
Ver también: "Una paz inefable finalmente irradiará de Sion"
"El nacimiento repentino de una gran Nación"
"Afganistán, señal "prenatal" del reencuentro venidero"
"El azote de YaHVéH contra la vara del asirio"
"Discerniendo el filo de la profecía"
"El retorno del remanente de Israel a Sión"
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