"Has dado a los que te temen bandera que alcen por causa de la verdad". 
(Salmo 60:4)


_____________________________________________________________
La dramática profecía de Oseas
y la prostituta Gomer:
matrimonio, divorcio,

y Nuevo Matrimonio.


“Convertíos, hijos rebeldes,...
porque yo soy vuestro Esposo
...y os introduciré en Sión”
Jeremías 3:14


EN EL PRIMER CAPÍTULO del libro de Oseas YaHVéH le da una extraña orden al profeta:

"Ve, toma por mujer a una prostituta
y ten hijos de prostitución con ella,
porque la tierra se prostituye
apartándose de YaHVéH".
Oseas 1:2

Es que este matrimonio desigual, entre un siervo de Dios y una prostituta, expresa la relación existente entre el Santo de ISRAEL – YaHVéH - y un pueblo corrupto que le había dado la espalda desde que se separara de la línea real de la Casa de David sediada en Jerusalem, y de su Templo. Y de esa unión entre santidad y corrupción nacerían “hijos de prostitución” cuyos nombres (propuestos también por YaHVéH) iban a hacer cruda referencia a la excomunión y posterior destierro decretada contra el reino apostata. Así, ahora YaHVéH le pide a su siervo que abandone a su mujer/prostituta, expresando de este modo el destierro entre las naciones de “Israel” y hablando figuradamente con sus “hijos de prostitución”, figura de la prole de “Israel” desterrada, les dice:

¡Contended con vuestra madre,
contended,
porque ella no es mi mujer
ni yo su marido!
Oseas 2:2

¿Terminaría así este drama/profecía? ¿Olvidaría para siempre Dios Elohim – YaHVéH – a “Israel” que en ese momento estaba echando de Su Presencia y de su tierra? La respuesta es NO ya que enseguida se nos relata una escena de seducción a la esposa rechazada y el objetivo final de ese despecho:

“Por eso voy a seducirla;
la llevaré al desierto
y hablaré a su corazón”.
Oseas 2:14

Y de esta seducción en el desierto – tipo de la predicación del evangelio a la “casa de Israel” inmersa en el desierto de las naciones - renacería un amor puro y sin mácula, y un nuevo matrimonio:

“Porque quitaré de su boca
los nombres de los baales,
y nunca más se mencionarán sus nombres....
Te desposaré conmigo para siempre;
te desposaré conmigo en justicia,
juicio, benignidad y misericordia.
Te desposaré conmigo en fidelidad,
y conocerás a YaHVéH”
Ose 2:17 -20

Sabemos que ese Nuevo Matrimonio entre Oseas y la ahora exprostituta Gomer se corresponde al Nuevo Matrimonio – Nuevo Pacto - de YaHVéH con el remanente santo de su pueblo desterrado. ¿Hay alguna alusión en el Nuevo Testamento a este Nuevo Matrimonio en pureza de Oseas – figura de YaHVéH – con la prostituta Gomer – figura de la “Israel” apostata ya redimida, purificada, santa y fiel para siempre? Efectivamente: a la iglesia de Jesús se le llama Novia del Cordero – a pesar de estar integrada por la prole de “Israel” desterrada entre las naciones -. Y así, pura y fiel, renacida para la eternidad acudirá a las bodas celestiales del Cordero (Apocalipsis 19:7). Las bodas están omnipresente en todas las parábolas, por ejemplo en Mateo 22:2:

"El reino de Dios es como un rey
que ofreció una boda para su hijo.

En realidad no es un matrimonio, sino un Nuevo Matrimonio, una restauración del matrimonio que fue roto. Y esto significa que todos aquellos pertenecientes a la “casa de Israel” desterrada que escuchen y reciban en su corazón la Palabra del evangelio en el destierro se convertirán de nuevo en Esposa/pueblo santo de YaHVéH, esto es, acudirán a las cenas y bodas celestiales del Cordero. Estos son los que constituyen el remanente santo de Israel al que ya nos referimos. Veamos como describe el apóstol Pablo esta re-aceptación de un remanente de su pueblo excomulgado y desterrado. Leemos en Romanos 9:25:

“Como también en Oseas dice:
"Llamaré pueblo mío
al que no era mi pueblo,
y a la no amada, amada”.

En donde el apóstol Pablo cita a Oseas 2:3:

“...Gomer concibió y dio a luz un hijo.
Y dijo Dios: “Llámalo Lo-ammi,
porque vosotros no sois mi pueblo
ni yo seré vuestro Dios".
Y leemos un poco después en Oseas 1: 8-9:

“y diré a Lo-ammi (No pueblo mío):
“¡Tú eres mi pueblo!",
y él dirá: "¡Dios mío!”
Oseas 2:23

Es decir un pueblo que era “NO pueblo mío” pasó a ser luego de su destierro y conversión al evangelio - y las nuevas bodas con YaHVéH - “pueblo mío”. Es que no hay medida mas severa que declarar “NO pueblo mío” al “reino de Israel”. Por eso el anuncio que un remanente de la descendencia de Israel sería de nuevo retornado a la comunión de ISRAEL - y a su tierra - era sin duda una enorme noticia. Y todo por las virtudes del sacrificio expiatorio en muerte de cruz del Hijo de Dios/Elohim: Jesucristo/ Yeshuahamashiaj a favor de ellos. Este retorno a la pertenencia de ISRAEL esta relatado así en Efesios 2:12:

“En aquel tiempo estabais sin Cristo,
alejados de la ciudadanía de Israel
y ajenos a los pactos de la promesa,
sin esperanza y sin Dios en el mundo.
Pero ahora en Cristo Jesús,
vosotros que en otro tiempo estabais lejos,
habéis sido hechos cercanos
por la sangre de Cristo”•

Los que estábamos “sin ciudadanía, sin esperanza y sin Dios/Elohim en el mundo”, de pronto somos aceptados nuevamente en la comunidad de ISRASEL y nos convertimos en “hijos del Dios Viviente”, “pueblo suyo”, y Novia a la espera de las bodas celestiales del Cordero:

“Gocémonos, alegrémonos
y démosle gloria,
porque han llegado las bodas del Cordero
y su esposa se ha preparado”.
Apocalipsis 19:7

El ministerio público de Jesús/Yeshua comenzó en las bodas de Canáa y ha de finalizar en las bodas celestiales del Cordero. Hay una boda celestial en el futuro de todo aquel que cree en la sangre redentora de la cruz. Y luego de ella viajaremos a nuestra “heredad perpetua”: Sión, que será cubierta por la Gloria del Altísimo como un dosel matrimonial hebreo/hupá.

¡Aleluya!.

***
Envía un e-mail a

jerusun@gmail.com

especificando “LIBRO” en el “asunto”
y te remitiremos GRATIS en PDF

"ESTRUENDO EN LAS NACIONES"

el glorioso retorno a Sión de

un remanente de todas

las naciones








No hay comentarios: