*
(el rapto de la iglesia/"virgen de Sión")
*
En
Isaías 54:1 se nos presenta una mujer que da hijos a la "estéril" - la
Jerusalem actual (nota 1). - y que parece ser la antítesis de la mujer
de Apocalipsis 12, ya que se nos presenta como “desamparada”:
“¡Regocíjate, estéril,
la que no daba a luz!
¡Eleva una canción y da voces de júbilo,
la que nunca estuvo de parto!,
porque más son los hijos de la desamparada
que los de la casada»,
ha dicho YaHVéH”.
la que no daba a luz!
¡Eleva una canción y da voces de júbilo,
la que nunca estuvo de parto!,
porque más son los hijos de la desamparada
que los de la casada»,
ha dicho YaHVéH”.
es
decir, nadie pensó nunca que la "desamparada" iba a tener hijos y sin
embargo es madre de una descendencia que se nos dice que es mayor que la
que dio a luz la “casada” la cual - aparentemente - se esperaba que
fuera la única en dar hijos a Sion.
* la "desamparada" y la "casada"
En
Jeremías 33:24 se nos dice que la nación de YaHVéH – ISRAEL – tiene
“dos familias”, que sabemos que son la “casa de Israel” y la “casa de
Judá”. Y en Oseas 1:6-7 vemos que YaHVéH tuvo un trato diferente con
cada una de ellas. Leamos:
“no me compadeceré más
de la casa de Israel,
ni los perdonaré.
Pero de la casa de Judá
tendré misericordia..."
de la casa de Israel,
ni los perdonaré.
Pero de la casa de Judá
tendré misericordia..."
Esto
es, de una “no se compadecerá” y a la otra “tendrá misericordia”. Y
aquella de la cual YaHVéH "no se compadecerá" - la "casa de Israel" -
fue llevada a un destierro sin memoria entre las naciones, mientras que
Jerusalem - la "casa de Judá - fue liberada milagrosamente del asedio de
Senequerib.
Y en 2 Reyes 17: 18-23 se dice:
“Ninguno quedo sino solo la Tribu de Judá...
fue entonces Israel tomada lejos de su propia tierra
hasta Asiria...”.
fue entonces Israel tomada lejos de su propia tierra
hasta Asiria...”.
Es
decir, hubo un día en que las “dos familias” de la misma nación de
YaHVéH toman rumbos diferentes: una fue al destierro entre las naciones
(que todavía dura), y otra - la "casa de Judá" - permaneció en su tierra
y, aunque mas tarde fue llevada cautiva a Babilonia - porque también
fue rebelde a YaHVéH -, volvió luego a su heredad.
Hoy
– a la vista de las naciones - el pueblo judío parece ser la única
descendencia de Abraham, Isaac y Jacob, en tanto que la "casa de Israel"
permanece en misterio aun para muchos de quienes tienen intimidad con
la Palabra.
Ahora
podemos responder la pregunta inicial: la mujer “casada” es la "casa de
Judá", y la mujer “desamparada“ que finalmente tuvo mas hijos que la
“casada” es la “casa de Israel” - que son las diez tribus del norte
lideradas por Efraín y Manases – desterrada entre las naciones desde el
año 722 A.C., y sin memoria de su pasado israelita.
* el drama profético de Oseas y Gomer (nota 2).
Ahora bien, en el libro de Oseas vemos un extraño drama profético YaHVéH le dice a su siervo - Oseas - :
"Ve, toma por mujer a una prostituta
y ten hijos de prostitución con ella,
porque la tierra se prostituye
apartándose de YaHVéH".
y ten hijos de prostitución con ella,
porque la tierra se prostituye
apartándose de YaHVéH".
Y
- como leímos - le pide que tenga "hijos de prostitución" con ella. Y
Dios Elohim - YaHVéH - le va poniendo nombres proféticos.
Con
el nombre del primero anuncia que la “casa de Israel” - es decir el
norteño reino de Israel, separado del reino de Juda - será derrotada en
batalla: “quebraré el arco de Israel”. El segundo fruto del vientre de
Gomer fue una hija a la que YaHVéH le puso por nombre Lo-ruhama: “porque
no me compadeceré mas de la "casa de Israel”, en donde se anuncia un
“divorcio". Y al tercero, que es un hijo, le puso Lo-ammi, “porque
vosotros no sois mi pueblo ni yo seré vuestro Dios”, en donde el
divorcio está consumado. Y en Oseas 2:2 YaHVéH declara que la “casa de
Israel” es como la prostituta Gomer y que por eso la desechará y la
enviará al desierto de las naciones. Y ese castigo a la “casa de
Israel” incluye algo terrible para quien fue parte de la nación de
YaHVéH. Leemos en Oseas 2:11:
”Haré cesar todo su gozo,
sus fiestas, sus nuevas lunas,
sus sábados y todas sus solemnidades”.
sus fiestas, sus nuevas lunas,
sus sábados y todas sus solemnidades”.
El
olvido decretado de las fiestas solemnes de ISRAEL y los sábados fue
como quitarle “el anillo de compromiso” a la “casa de Israel”, y dejarla
“sin Dios y sin esperanza” en el desierto de las naciones. Peor
situación es difícil de imaginar.
De
todas las “escenificaciones” que pidió YaHVéH a sus siervos, la que
pidió a Oseas - tomar por esposa a una prostituta - es la mas compleja y
dolorosa: involucra la elección de una esposa prostituta, la elección
del nombre profético de sus hijos y la posterior separación de ese
extraño matrimonio. Todos estos episodios que desgarraron la vida
íntima del profeta. Pero YaHVéH no hace nada por capricho y si la
palabra profética se detiene con tanto detalle en este drama es porque
quiere anunciar y subrayar algo trascendente.
El significado y propósito de las iglesias de Cristo y su destino están
explicados en ese extraño drama. Si los creyentes hubiéremos reparado
en todo lo que aquí se anuncia hubiéramos entendido sin desvíos todo lo
concerniente al sentido, propósito y destino de las iglesias de Cristo.
Y este drama profético tiene un final feliz: YaHVéH pide a Oseas tiempo después de que le pidiera para abandonar a la prostituta Gomer – a la que antes había pedido que tomara por esposa - ¡le pide algo directamente inverso!:
“Ve y ama a una mujer amada
de su compañero y adúltera;
así ama YaHVéH a los hijos de Israel,
aunque ellos se vuelven a dioses ajenos..."
(Oseas 3:1)
de su compañero y adúltera;
así ama YaHVéH a los hijos de Israel,
aunque ellos se vuelven a dioses ajenos..."
(Oseas 3:1)
Esto
es, le pide que retome a Gomer en nuevo matrimonio y compara esta orden
inversa con su amor misericordioso por los "hijos de Israel" /"casa de
Israel" a quienes extiende de nuevo Su amor incondicional. Y Oseas
obedece: va a buscar a Gomer y le dice:
“Tú serás mía durante muchos días;
no fornicarás ni te entregarás a otro hombre,
y yo haré lo mismo contigo”.
(Oseas 3:3)
no fornicarás ni te entregarás a otro hombre,
y yo haré lo mismo contigo”.
(Oseas 3:3)
Es
el anuncio de un nuevo Pacto matrimonial fruto de la misericordia y el
amor fiel a su ex esposa que ahora será una esposa fiel. Y esto se
complementa con una declaración de amor eterno a su esposa antes infiel:
“Te desposaré conmigo para siempre;
te desposaré conmigo en justicia,
juicio, benignidad y misericordia.
Te desposaré conmigo en fidelidad,
y conocerás a YaHVéH."
(Oseas 2:19:20
te desposaré conmigo en justicia,
juicio, benignidad y misericordia.
Te desposaré conmigo en fidelidad,
y conocerás a YaHVéH."
(Oseas 2:19:20
Esto es, a la "casa de Israel" - "Efraín" - apostata y desterrada sin memoria entre las naciones le sería extendido el amor misericordioso de su primer esposo: YaHVéH
* "sin mancha ni arrugas"
No
debe asombrarnos entonces que el apóstol Pablo se refiera a la iglesia –
esto es, las iglesias de Cristo despojadas de cizaña – como una novia
preparada para un matrimonio santo:
“...a fin de presentársela a sí mismo,
una iglesia gloriosa,
que no tuviera mancha ni arruga ni cosa semejante,
sino que fuera santa y sin mancha."
(Efesios 5:27)
una iglesia gloriosa,
que no tuviera mancha ni arruga ni cosa semejante,
sino que fuera santa y sin mancha."
(Efesios 5:27)
dentro de un contexto en que asimila el matrimonio a la relación entre Cristo y la iglesia:
“porque el marido es cabeza de la mujer,
así como Cristo es cabeza de la iglesia,
la cual es su cuerpo, y él es su Salvador.
Así que, como la iglesia está sujeta a Cristo,
así también las casadas
lo estén a sus maridos en todo".
(Efesios 5:23-24)
así como Cristo es cabeza de la iglesia,
la cual es su cuerpo, y él es su Salvador.
Así que, como la iglesia está sujeta a Cristo,
así también las casadas
lo estén a sus maridos en todo".
(Efesios 5:23-24)
y también:
“pues nadie odió jamás a su propio cuerpo,
sino que lo sustenta y lo cuida,
como también Cristo a la iglesia, ...
Grande es este misterio..."
(Efesios 29:32)
sino que lo sustenta y lo cuida,
como también Cristo a la iglesia, ...
Grande es este misterio..."
(Efesios 29:32)
Y
estas declaraciones deberían sacudirnos por su profundo significado:
los cristianos estamos llamados a ser una sola carne con Cristo. Por eso
es que en otro lugar se dice debemos "completar en nuestro cuerpo los
padecimientos de Cristo", así como en un matrimonio bien establecido la
esposa sufre los dolores de su esposo, y éste los de su esposa. Solo cuando llegamos a esta identificación con nuestro Señor podemos escuchar el llamado a las bodas celestiales:
"‘Bienaventurados los que son llamados
a la cena de las bodas del Cordero"...
‘Estas son palabras verdaderas de Dios’”
(Apocalipsis 19:9)
a la cena de las bodas del Cordero"...
‘Estas son palabras verdaderas de Dios’”
(Apocalipsis 19:9)
Estas
bodas celestiales sustituyen a la ceremonia “nupcial” celebrada en el
Sinaí en oportunidad del primer pacto. Leamos la declaración de YaHVéH
en Jeremías 31:32, cuando anuncia el Nuevo Pacto:
“Vienen días, dice YaHVéH,
en los cuales haré un nuevo pacto
con la casa de Israel y con la casa de Judá.
No como el pacto que hice con sus padres
el día en que tomé su mano
para sacarlos de la tierra de Egipto;
porque ellos invalidaron mi pacto,
aunque fui yo un marido para ellos,
dice YaHVéH”.
en los cuales haré un nuevo pacto
con la casa de Israel y con la casa de Judá.
No como el pacto que hice con sus padres
el día en que tomé su mano
para sacarlos de la tierra de Egipto;
porque ellos invalidaron mi pacto,
aunque fui yo un marido para ellos,
dice YaHVéH”.
¿Leímos
bien?: YaHVéH dice que fue un buen “marido” para las dos familias de
ISRAEL y que estas invalidaron el Pacto. De modo que Dios/Elohim -
YaHVéH - concibe los pactos con su pueblo como un pacto matrimonial.
Y por consiguiente el Nuevo Pacto será también entre el Marido
celestial y su Esposa: el ISRAEL DE DIOS/ virgen de Israel/ virgen de
Sión/ iglesia de Cristo.
Las
primeras bodas de YaHVéH con su pueblo fueron en las faldas del Sinaí,
las segundas – tanto para la "casa de Israel" como para la "casa de
Juda" – serán en el cielo. Las primeras terminaron en fracaso y fueron
invalidadas por la infidelidad de Israel y Judá, las segundas serán
eternas. ¿Entendemos ahora el profundo significado del drama profético
de Oseas y de su renovado matrimonio con Gomer?.
* los hijos de la “mujer vestida de sol” y los “hijos de la desamparada”
*
La
“mujer vestida de sol” de Apocalipsis 12, y la “desamparada” –
“divorciada” – que da a luz en su condición de desamparo lejos de su
Marido, son dos símbolos poderosos que expresan realidades distintas del
plan de redención eterno de Dios/Elohim.. Pero, sin embargo, los
“hijos” de estas dos "mujeres" son los mismos: los redimidos.
Los
redimidos son nacidos de Espíritu – renacidos – y en ese sentido son
hijos de la mujer “vestida de sol” que es madre de los nacidos del
Espíritu y que tienen por tanto una naturaleza celestial - de ahí que su
ciudadanía está en los cielos (Filipenses 3:20) -. Pero también son
descendencia del apostata “Efraín” - "hijos de Israel"/ "casa de
Israel" - esto es, del Israel adúltero “sin Dios y sin esperanza” que
debió de ser rescatado de su destierro entre las naciones por la “pura
gracia” divina. Ambas mujeres simbolizan perfiles diferentes del mismo
grupo de elegidos: los redimidos.
Y esta restaurada "virgen de Israel" - que eso son las iglesias de
Cristo depurada de su cizaña - es entonces la que cumple las condiciones
para un Nuevo Matrimonio con su Marido y Redentor (Isaías 54:5). Y ha
de volver a su heredad perpetua: Sión, restaurada por su Gloria cunado
vengan a existir "nuevos cielos y nueva tierra".
¿Visualizamos
los creyentes ambas dimensiones de nuestra redención?. ¿Nos vemos como
“hijos de prostitución” purificados por la sangre del Cordero para ser
restaurados en una virgen pura - la “virgen de Israel” - y la vez hijos
de la “mujer vestida de sol” nacidos del Espíritu eterno de Dios/Elohim y
por lo tanto “participantes de la naturaleza divina”?.
En
el tiempo en que la "virgen de Israel" - los redimidos - vuelva a Sión
en el mundo venidero/atid lavoh, a morar con su Marido celestial, la
Voluntad de YaHVéH será hecha "tanto en la tierra como en los cielos":
“En aquel tiempo ...dice YaHVéH;
responderé a los cielos,
y ellos responderán a la tierra”,
Oseas 2:21
responderé a los cielos,
y ellos responderán a la tierra”,
Oseas 2:21
Es
que cielos y tierra tendrán una misma naturaleza: vibrarán al unísono
bajo la voluntad del Altísimo. Este es el episodio final de la
"alegoría" del nuevo matrimonio del profeta Oseas y la ex-prostituta
Gomer que fue restaurada a una virgen pura.
^^^
nota 1):
en este pasaje es posible también entender la expresión "la estéril"
como una referencia a "Jerusalem" actual en el sentido que la capital
hace alusión al Reino que hoy es para YaHVéH un "tabernáculo caído" que
aguarda ser levantado en el mundo venidero (Amos 9:11). En este contexto
"la estéril" - que es hoy capital de un Estado laico y mayoritariamente
ateo - ve llegar luego de su colapso y restauración a una multitud de
hijos fruto de la descendencia de aquella que nunca pensó que podía
tenerlos por vivir en el destierro: la "desamparada" casa de Israel.
nota 2):
es frecuente que YaHVéH pida a sus profetas que escenifiquen episodios
que escenifican la profecía que luego anunciarán. Sucedió con Isaías
(Is. 20:3), con Jeremías (Jer. 13:1-7), y con Ezequiel (Ez. 4:1—5:17),
por ejemplo.
***
La historia del nuevo matrimonio de la "desamparada" se puede leer - también - en:
en donde se narra esta historia inscripta en las constelaciones desde el inicio de los tiempos.
***
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